Nos introducimos en el fascinante mundo de la Fresa o Fragaria: Un género de delicadas frutas aromáticas.
El género Fragaria spp., conocido por sus pequeños y aromáticos frutos, agrupa diversas especies de plantas que producen fresas o frutillas. Estas pertenecen a la familia Rosaceae y se caracterizan por sus frutos carnosos, desde las fresas silvestres de bosques hasta las variedades comerciales que encontramos en los mercados.
Diversidad de grupos dentro de las Fresas.
El grupo de las fresas silvestres, Fragaria vesca, representa las «fresas originales». Estas plantas, que a menudo se denominan «fresitas del bosque«, destacan por sus pequeños y aromáticos frutos, con un sabor generalmente ácido y una floración continua.
En contraste, el grupo de los fresones (Fragaria x ananassa) se distingue por su mayor tamaño y su cultivo intensivo, siendo la base de la producción comercial a nivel mundial. En España, Huelva lidera la producción, consolidándose como uno de los principales exportadores europeos.
Entre estos extremos, encontramos variedades de fresas «cultivadas», típicamente remontantes o de día neutro, que ofrecen cosechas prácticamente todo el año.
El origen de la Fragaria o fresa.
El género Fragaria spp. pertenece a la familia Rosaceae y su origen se remonta a zonas templadas del hemisferio norte, y sus especies se distribuyen por diversas regiones de Asia, Europa y América.
El origen de la fresa cultivada moderna, F. ananassa, se remonta al siglo XVIII, cuando se desarrollaron híbridos entre F. chiloensis y F. virginiana, dando lugar a las fresas grandes y jugosas que conocemos hoy.
La leyenda que relaciona a la fresa con la muerte de Adonis proviene de la mitología griega. Adonis, joven de gran belleza y amante de la diosa Afrodita, murió trágicamente al ser atacado por un jabalí durante una cacería. Cuando Afrodita supo de su muerte y vio su cuerpo sin vida, lloró desconsoladamente. Sus lágrimas al caer al suelo y mezclarse con la sangre de Adonis, dieron lugar a pequeñas y delicadas fresas rojas.
Este mito vincula a la fresa con el amor, la pasión y la fugacidad de la vida. Su nombre deriva de la fragancia que posee (fraga, en latín).
¿Cómo es la Fresa?
La planta de fresa es una herbácea perenne, rizomatosa y estolonífera, con un sistema radicular fibroso y superficial que optimiza la absorción de nutrientes.
Sus tallos principales son cortos y se desarrollan en forma de corona, dando origen a estolones que permiten su propagación vegetativa y a hojas trifoliadas de un verde intenso con una textura algo áspera por la presencia de una ligera vellosidad.
Los folíolos están sostenidos por un pecíolo fuerte y largo que les permite captar la luz solar de manera eficiente y desempeñar un papel fundamental en la fotosíntesis.
Las flores blancas de la fresa, con cinco pétalos y numerosos estambres, originan un fruto especial: la parte carnosa roja que conocemos es un receptáculo engrosado que contiene los verdaderos frutos, los aquenios, esas pequeñas estructuras que solemos confundir con semillas en la superficie de la fresa.
Esta característica única convierte a la planta de fresa en un ejemplo especial de fruta agregada, donde la suma de muchos frutos diminutos en un solo receptáculo ofrece el dulce y refrescante sabor que conocemos.
Al igual que ocurre con las frambuesas, en el caso de las fresas existen variedades remontantes y no remontantes.
Las fresas remontantes (también llamadas de día neutro) florecen y producen frutos durante todo el año en condiciones adecuadas, lo que las hace populares en el mercado.
Las variedades no remontantes (o de día corto), en cambio, concentran su producción en una gran cosecha anual, normalmente durante la primavera o a comienzos del verano.
Variedades de Fresas MaQu.
En MaQu disponemos en formato de maceta de 11, 13 y tarrina de 25 cm de Ø la variedad ‘Reine des Vallées’ que pertenece a la especie Fragaria vesca. Se trata de una fresa tipo silvestre, no remontante, conocida por su sabor intenso y su pequeño tamaño.
También plantas de fresa cultivadas en formato de maceta de 11 y 13 cm Ø de la especie Fragaria x ananassa en las siguientes variedades:
- ‘Charlotte’: Es una variedad remontante, destacada por su sabor dulce y su aroma intenso.
- ‘Blanca’: Su principal particularidad es su coloración pálida o blanca y un sabor dulce, con notas de piña en algunos casos.
- ‘Framberry’: Se caracteriza por su sabor que recuerda a una mezcla entre fresa y frambuesa, de ahí su nombre.
- ‘Mariguette’: Es conocida por ser una variedad remontante que combina un excelente sabor, textura firme y gran aroma.
- ‘Mara des Bois’: Es muy popular entre las variedades remontantes por su aroma que recuerda al de las fresas silvestres y su dulzura intensa.
Cuidados de la Fragaria o Fresa.
Elegiremos plantas de fresa del tipo ‘remontantes o de día neutro’. Estas nos florecerán durante casi todo el año, dándonos fresas durante muchos meses, incluso durante el invierno si este no es muy frío.
Su ubicación será a pleno sol, en aquella zona más iluminada que dispongamos.
Unas seis plantas nos asegurarán una buena producción. Las podemos plantar en jardineras de 50 cm de largo con tres plantas cada una, o en macetas individuales y colgarlas en la barandilla o sobre la pared, lo que nos permite dejar libre el espacio del suelo para otras plantas.
El sustrato elegido debe ser turboso y aireado para retener bien la humedad sin llegar al encharcado. Puede ser por ejemplo el sustrato de plantación o sustrato especial para plantas de exterior.
Las mejores épocas de plantación pueden ser durante la primavera y el otoño, aunque si las compramos en maceta las podemos plantar durante todo el año. En el fondo de la maceta o jardinera pondremos una pequeña capa de arcilla expandida o grava que nos sirva de drenaje. Dejaremos la planta al mismo nivel de plantación que tenía, como mucho un poco más porque corremos el riego de que se pudra por la base de su cuello.
Una vez plantadas las regaremos copiosamente directamente sobre el sustrato y no sobre el follaje. A partir de aquí, la frecuencia del riego será bajo el criterio de mantener el sustrato siempre húmedo sin llegar a encharcarlo. Las plantas de fresa requieren de mucha humedad en el suelo.
Cada dos semanas y a la dosis recomendada por el fabricante, le aportaremos en el riego un fertilizante equilibrado, por ejemplo 15-15-15 ecológico.
Podemos colocar sobre el sustrato retales de saco o una pequeña capa de paja, con el fin de que los frutos no se ensucien. Si hace falta iremos recolocando las flores para que queden bien visibles y puedan ser fecundadas por las abejas y asegurarnos buenos frutos.
Para su recolección, que puede ser desde marzo a septiembre según el clima, las cortaremos con los dedos, por la mañana preferentemente porque están más turgentes y sabrosas.
La poda de la Fresa.
Las plantas de Fragaria se pueden podar como parte del manejo agrícola, para mantener su salud, vigor y productividad. La poda en plantas de fresa se realiza principalmente con tres objetivos:
- Eliminar hojas viejas y dañadas: Se recomienda podar las hojas que estén marchitas, secas, enfermas o dañadas para reducir la presencia de enfermedades y plagas y mejorar la circulación del aire alrededor de la planta. Esto ayuda a mantener el follaje sano y favorece un mejor desarrollo.
- Controlar los estolones: Los estolones pueden ser podados si el objetivo es concentrar la energía de la planta en la producción de frutos. Si no se controlan, pueden hacer que la planta gaste más energía en producir nuevas plantas en lugar de centrarse en el fruto.
- Renovación de plantas en variedades remontantes: En el caso de estas variedades puede realizarse una poda de renovación al final de la temporada de fructificación. Esto implica cortar parte del follaje para rejuvenecer la planta y promover un nuevo ciclo productivo.
Plagas y enfermedades de las Fresas.
Las fresas no solo nos gustan a nosotros… ¡también a los pájaros! Si hay mucho riesgo de que las picoteen, las protegeremos colocando una fina red de malla por encima.
El cultivo de fresas puede verse afectado por diversas plagas y enfermedades que requieren atención para mantener una producción saludable y rentable.
Entre las plagas más comunes en el cultivo de fresas encontramos los Ácaros (Tetranychus urticae); Pulgones (Aphis spp.); Trips (Frankliniella occidentalis); Cochinillas; Gusanos del suelo (larvas de coleópteros); Nematodos y Mosca blanca (Trialeurodes vaporariorum).
Entre las enfermedades comunes en el cultivo de fresas podemos encontrar la Botritis (Botrytis cinerea); Mildiu (Peronospora sparsa); Oídio (Podosphaera aphanis); Antracnosis (Colletotrichum spp.); Verticilosis (Verticillium dahliae); Mancha foliar (Mycosphaerella fragariae y otros); Podredumbre negra de la raíz y el Virus de las manchas necróticas del polen.
El manejo integrado de plagas y enfermedades en el cultivo de fresas implica la aplicación de prácticas culturales adecuadas, la rotación de cultivos, el uso de variedades resistentes, la correcta nutrición de las plantas y, cuando sea necesario, el uso de productos fitosanitarios específicos.
Beneficios de la fresa.
Las fresas destacan por ser una de las frutas más populares y versátiles. Esto no solo se debe a su delicioso sabor, sino también a las múltiples propiedades y beneficios que ofrecen para nuestro organismo.
Esta fruta es una excelente fuente de antioxidantes y minerales como el manganeso, magnesio y potasio. Además, contiene vitamina C, B2, B3, ácido fólico, es rica en fibra y tiene un bajo contenido de azúcar.
Cabe señalar que aproximadamente el 90% de su composición es agua. Por otro lado, a pesar de su sabor dulce, las fresas son una opción ideal para dietas orientadas a la pérdida o control de peso, ya que aportan pocas calorías.